Sabrá a qué santo se encomienda Rafael García Bringas, pero su carrera política es un milagro. No tiene base social. Desdeña al que lo ayuda. Traiciona en cada lance. Y cuando yace en el olvido, no falta una mano ingenua que lo extrae de sus cenizas.
Nada vale políticamente el virtual candidato del PRI a la diputación federal por Coatzacoalcos. Sus fans se disgregaron en el tiempo y en la duda, a veces en la oposición, a veces en el regazo del poder, pero invariablemente viendo a García Bringas en el disfrute de las prebendas, negado siempre a compartir.
Moisés Sánchez: ¿fue el crimen organizado?
Muy suficiente, el fiscal Luis Ángel Bravo Contreras sigue empeñado en su tesis de que el periodista José Moisés Sánchez Cerezo desapareció por un conflicto personal con el alcalde de Medellín de Bravo, Omar Cruz Reyes, cuando el modus operandi del “levantón” y posible desenlace corresponde a un grupo más letal: el crimen organizado.
Procurar justicia no es lo que distingue al célebre “Culín”. Guionista de lo absurdo, hacedor de historias judiciales en las que sólo él cree, Bravo Contreras marca tiempos, hace pausas, entretiene, oculta datos, inventa coartadas y manipula el caso Moisés Sánchez tan solo para confundir. Pero entre todo va dejando cabos sueltos.
Seguir leyendoCoatza: Javier Duarte ya tronó al PRI
Coatzacoalcos no estaba descompuesto, pero Javier Duarte lo echó a perder. Lo llenó de piedras. Forzó una candidatura que nunca llegó. Generó un conflicto al interior del PRI. Y hoy, el distrito más seguro de Veracruz va a caer en manos de la oposición. O mejor dicho, de un infiltrado en la oposición.
Entre el marcelismo hay estupor. No asimilan cómo una candidatura que se concibió con tiempo, que obedeció a pactos y amarres, que provino de un acuerdo con el gobernador de Veracruz y más allá de él, se frustró en cuestión de minutos, en la víspera del registro en la sede estatal del PRI.
Julio Scherer: comienza la leyenda
Decía don Julio Scherer García que al periodista lo avalan los hechos; sin ellos está perdido. La frase se ha repetido miles de veces. La han adoptado cientos de nuevos periodistas, los de espíritu crítico, los de compromiso social, los que entienden la comunicación como un factor indispensable de la democracia.
Don Julio se fue. Dejó de existir la madrugada del miércoles 7, en la paz de su familia, agobiado por la enfermedad, en la intimidad de los suyos, casado con sus convicciones hasta el momento final.
Proceso fue la casa de Julio Scherer, su hijo pródigo. Proceso ha sido una escuela, taller permanente de periodismo de investigación, documentado todo lo que se ha de publicar.
¿Vive o no vive el periodista Moisés Sánchez?
Nada se sabe del periodista José Moisés Sánchez Cerezo. No se sabe si está vivo. O si lo ultimaron. Pero lo que sí se sabe es que por no arruinar la visita del Presidente Enrique Peña Nieto a Veracruz, se está ocultando la verdad.
Días aciagos, inciertos, los que viven los suyos, su familia y sus amigos, la gente que cree en él. Lo “levantaron” el viernes 2, a eso de las 7 de la noche. Allanaron su hogar, una humilde vivienda de El Tejar, municipio de Medellín de Bravo, que deja ver la pobreza en que vive, con paredes sin repellar y apenas lo indispensable.
Javier Duarte: su infame concepto de periodista
Es infame el concepto de Javier Duarte sobre el gremio periodístico. Le son afines los aduladores que lo colman de frases dulces, halagos desmedidos y zalamería rebuscada porque de alguna manera han de justificar el pago de la factura, el viaje todo incluido, la beca en el extranjero.
Conforma ese ejército de lisonjeros el coro desafinado que sólo sirve al gobernador de Veracruz para estar ajeno a la realidad, y que nada dicen de la economía del desastre, la inseguridad sangrienta, el abandono social y el territorio en disputa entre los grupos del crimen organizado, que es ya parte del paisaje urbano jarocho.
Moisés Sánchez: el quinto periodista desaparecido en Veracruz
Como sea, al precio que sea, Javier Duarte está empeñado en que el levantón a José Moisés Sánchez Cerezo no entre a la estadística de violencia, persecución, hostigamiento y agresión contra periodistas. No lo quiere en su indigno récord.
Categoriza al director del semanario La Unión como un “taxista y activista vecinal”, un personaje que “tiene una página de Facebook” porque, dice el gobernador de Veracruz, no se le demerita pero “hay que decir las cosas como son”.
Héctor Yunes no traga a Javier Duarte
Héctor Yunes Landa sí anda a la greña con Javier Duarte. No lo dice y hasta lo niega. Refiere que su discrepancia es de concepto político, pero que ni se pelea con el presidente ni tampoco con el gobernador. Pero en los hechos, sí hay bronca, y grande.Se engalló desde antes que el gobernador de Veracruz impusiera la gubernatura de dos años, no sólo por el daño a la política social, a la inversión privada, a los programas y proyectos, y llegó a decir que la iniciativa de Javier Duarte no tendría su apoyo, incluso si contara “hipotéticamente” con el aval del Presidente Enrique Peña Nieto.
Seguir leyendoJavier Duarte: vocación para el engaño
Javier Duarte no es un tipo leal. No le interesa. Pudo hablar con la verdad. Pudo decir que el impuesto por tenencia vehicular no se elimina; que tendrá un subsidio; que le puso candados, y que no todos podrán acceder a él. Pero prefirió mentir. Tiene vocación para el engaño.
No eliminó el impuesto de tenencia vehicular; sólo lo subsidia, y además crea otros impuestos también relacionados con el uso de automóviles para compensar la baja de ingresos.
Yuribia: se quebraron los tatahuis
Alguien mareó a los ejidatarios que tomaron la presa Yuribia. Les hizo creer que el sabotaje es bueno. Les vendió la idea de que en la lucha social se vale todo. No les dijo que el sabotaje es un delito. No les dijo que enfrentarían denuncias penales. No les dijo que podían parar en la cárcel.
Lo vinieron a entender 24 días después, en sus manos la presa Yuribia que surte de agua a Coatzacoalcos, Minatitlán y Cosoleacaque, en ascuas medio millón de habitantes en la zona sur que no son culpables de su desgracia, trastocada su vida, la de los centros escolares, el área de salud y toda actividad.