Orizaba, Ver.- Miembros de la ayudantía del gobernador de Veracruz, Javier Duarte de Ochoa, habrían dado positivo en el examen antidoping que se les practicara tras la balacera que protagonizaran al mediodía del sábado 8 en el hotel Trueba.
De fuentes extraoficiales, la versión fue difundida por el periódico Mundo de Córdoba, en su portal de internet, en el cual reseña el escándalo suscitado por los escoltas del gobernador quienes protagonizaron un enfrentamiento bajo los influjos del alcohol.
“Se conoció extraoficialmente que algunos de los ‘guaruras’ resultaron positivos en la prueba antidoping que realizó el personal de Servicios Periciales de la Procuraduría General de Justicia”, refiere el rotativo.
Cita los nombres de ocho elementos de la guardia personal del gobernador Javier, quien ese sábado estaría en Orizaba a partir de la una de la tarde. De ahí la presencia de su equipo de avanzada.
Los nombres citados por el Mundo de Córdoba son los siguientes: Pablo Balderas Romero, Carlos Osvaldo Carranza de los Santos, Fernando Palacios Chang, Víctor Valencia Argüelles, Lauro Landa Acosta, Hugo Hernández Díaz, Rubén Rodríguez Olvera y Luis David Cortés. Este último fue quien realizó el registro de los miembros de la ayudantía en el hotel Trueba, propiedad del ex director de Policía Municipal, Fernando Trueba Coll, amigo fraterno del alcalde Juan Manuel Diez Francos.
Aunque en diversos despachos se mencionó que eran seis habitaciones reservadas a nombre de la escolta del gobernador de Veracruz, el rotativo señala que se trató sólo de cinco y enumera cuales fueron las que les asignaron: 105, 106, 304, 405 y 502.
La balacera al parecer ocurrió en las habitaciones 105 y 106 pues en ellas se hallaron más de 12 casquillos percutidos.
Hasta el momento, el gobierno de Veracruz y concretamente la Secretaría de Seguridad Pública no ha admitido que fueron los miembros de la escolta de Javier Duarte quienes, al calor de una parranda, se enfrentaron y detonaron sus armas.
Para la SSP, los escoltas repelieron un ataque de un grupo armado, según difundió en el comunicado 0728, el mismo sábado 8, cuando comenzaban a difundirse las versiones que advertían que el choque entre los “guaruras” estuvo precedido de una noche licenciosa, en el bar Bucanero, desde el viernes 7. Y más tarde, estando de servicio, discutieron y se enfrentaron a balazos.
El comunicado 0728 de la SSP, dice lo siguiente:
“Fuerzas del orden repelieron la agresión de un grupo delincuencial sin que se registraran lesionados o abatidos; hay una persona detenida.
“Los hechos ocurrieron la mañana de este sábado en la calle Oriente 6 de esta ciudad cuando las fuerzas de seguridad detectaron a un grupo de hombres armados quienes los agredieron suscitándose el enfrentamiento”.
Los integrantes de la “ayudantía”, se hospedaron desde el viernes 7. Minutos después salieron a pasear, según personal del hotel Trueba. Se dirigieron al bar Bucanero, donde permanecieron ingiriendo bebidas embriagantes. Otra versión señala que siguieron la parranda en el bar Camaroninas.
El personal del hotel reporta que uno de los dos grupos de “guaruras” del gobernador regresó al filo de las 3 de la mañana y que se dedicaron a escandalizar, profiriendo insultos y reclamos que molestaron a los huéspedes que en ese momento dormían.
Los demás integrantes de la ayudantía se hicieron presentes a eso de las 11 de la mañana del sábado 8, luego que concluyeron la juerga en La Isla de la Barra, junto al hotel Trueba.
Poco después se recrudecieron los reclamos. Entonces se escucharon los gritos, los insultos y finalmente los disparos, provocando alarma entre los huéspedes y el personal del hotel Trueba.
Ante las llamadas de emergencia, se apersonó un grupo de policías municipales, para quienes también hubo respuesta a balazos. Llegó el Ejército, la Naval y Seguridad Pública de Veracruz, quienes acordonaron el área para evitar que los curiosos fueran a resultar heridos.
Salvo unos cuantos cristales dañados, en los cuales se apreciaban los impactos de bala, la situación pudo ser controlada. Autoridades y elementos de policía iban y venían, ingresando al hotel.
Llegó al lugar el alcalde de Orizaba, Juan Manuel Diez Francos, quien tuvo un altercado con la prensa cuando se negó a dar información sobre lo ocurrido y el reportero Jacinto Romero Flores lo conminó a sonreír, al fin que estaba en Orizaba, en alusión al lema de su alcaldía.
Eso enfureció a Diez Francos, cuyo carácter es irascible. De acuerdo con la versión del periódico Notiver, el alcalde señaló al periodista con el índice y le expresó que no se burlara ni incurriera en majaderías. “Eso no te lo voy a permitir”, le dijo. Romero Flores le preguntó si consideraba que se trataba de majaderías. Diez Francos respondió que sí.
Tres días después, el gobierno de Veracruz insiste en que no hubo enfrentamiento entre los miembros de la escolta de Javier Duarte sino que “repelieron el ataque de un grupo armado”, habiendo realizado detenciones que en ningún momento acreditó.
Su versión se vino abajo cuando el alcalde Juan Manuel Diez Francos escribió en su cuenta de Facebook que no se trató de ningún grupo delincuencial armado sino de los escoltas en conflicto.
“Lo sucedido fue, que en una habitación del hotel hubo una discusión, pleito entre escoltas de ayudantía de Gobierno del Estado y a uno de ellos se le escapó un tiro y rompió un cristal de una ventana. No existe ningún hombre herido ni ningún hombre muerto”, dijo el alcalde.
Otra fuente oficial, el director de Gobernación municipal, Juan Manuel Herebia, también señaló que el problema fue entre los guardaespaldas del gobernador Javier Duarte de Ochoa.
“Lo que sabemos en este momento es que estaban hospedados personal de Ayudantía del Gobierno del Estado y por alguna razón hubo detonaciones dentro de la habitación de estas personas que tenían seis habitaciones alquiladas; está en este momento personal de Periciales haciendo las averiguaciones para saber si los tiros están dentro de la habitación o fueron de habitación a habitación”.
El gobierno de Veracruz tampoco ha fijado su postura respecto al posible positivo en la prueba antidoping que les habría aplicado Servicios Periciales de la Procuraduría estatal, tal como consigna El Mundo de Córdoba.