Robarse 5 mil millones con empresas fantasma

* Cuitláhuac, el nuevo Duarte  * Y Nahle mantendrá a Lima Franco en Sefiplan  * Desfile de Catrinas: el grotesco espectáculo del gober  * Isabel Romero, al circo para elegir jueces  * Sheinbaum ignora su historial  * Al PRI, una regiduría en Coatza  * Hay cuatro aspirantes y hasta “Güicho” Vasconcelos se apunta

Rocío Nahle tiene un problema. Su pupilo, su cómplice, su protegido Cuitláhuac García le bailó 5 mil millones de pesos al erario usando empresas fantasma, al estilo Javier Duarte. Y Nahle, que es toda pureza, lo tiene que hacer pagar.

A ese problema, Nahle suma otro. Instruyó que José Luis Lima Franco, responsable de los dineros del gobierno saliente, permanezca como secretario de Finanzas y Planeación del gobierno de Veracruz.

O sea, uno de los sospechosos recibe premio y hasta diploma de honor.

Suena de locos, pero así es Norma Rocío. Se le meten ideas absurdas en la cabeza y no sabe cómo parar. Ve el tsunami venir, se pone el salvavidas y cree que va a flotar.

La revelación corrió a cargo de Excélsior, detallando que el gobierno de Veracruz pagó 5 mil millones de pesos a 227 empresas fantasma, creadas ex profeso para saquear la arcas, reportando como domicilios fiscales casas habitadas por gente de escasos recursos, que ignoraban el lío en que los metieron, y en algunos casos hogares deshabitados con las que “proveedores” perpetraron el fraude.

Suena al modus operandi de Javier Duarte de Ochoa, ese preclaro priista, ícono de la nueva generación tricolor, priista de nulos escrúpulos que diseñó un esquema complejo en el que su gobierno le pagaba a las empresas fantasma y éstas trasladaban los recursos a empresas fachada, algunas de ellas inmobiliarias, multiplicando las inversiones hasta diluir el producto del saqueo.

Duarte tuvo un staff de cómplices, prestanombres que a su vez eran funcionarios de gobierno, amigos personales, operadores financieros, héroes de la transa que se prestaron a otorgar contratos a empresas creadas con la complicidad de notarios, usando la identidad de gente pobre, convirtiéndolos en contribuyentes ante Hacienda, sin siquiera saberlo, y empleando sus nombres y domicilios que tomaron de los padrones de programas sociales. Por esas empresas pasaron cientos de millones de pesos, pero los supuestos “dueños” nunca vieron un centavo.

Hoy, la trapacería se repite con Cuitláhuac García Jiménez, el gobernador emanado de Morena, protegido de Norma Rocío Nahle García, quien en un mes más lo habrá de relevar.

Raúl Flores Martínez, autor del reportaje en Excélsior, cuenta que el gobierno veracruzano usó 227 empresas para asestarle un tiro de gracia al presupuesto estatal.

“Entre las empresas investigadas figuran nombres como Dimaq de Xalapa S.A. de C.V.; Abastecedora de Insumos y Equipos Comerciales S. de R.L. de C.V.; Aguas Minerales de los Tuxtlas SA de CV; Distribuidora Biotecpharma S. de R.L. de C.V., y Phono & Medical SA de CV, las cuales comparten la característica de tener direcciones fiscales en domicilios particulares. Estas compañías, según los informes, fueron creadas en su mayoría entre 2019 y 2022, período que coincide con la administración de García Jiménez al entrar al poder en la administración veracruzana”.

Reveló detalles que el diputado local priista Marlon Ramírez Marín, detonó hace dos años, cuyo entramado es una calca del que usara Javier Duarte y que lo llevara a prisión.

Sólo que esta vez Excélsior le dio dimensión nacional.

“A través de una complicada ingeniería contable –refiere el rotativo–, la administración de Cuitláhuac García se estructura mediante la creación de empresas ‘fachada’ que permiten redirigir contratos sin controles efectivos, empleando prestanombres y beneficiarios de programas sociales como representantes legales, lo que hace difícil de rastrear, facilitando la triangulación de recursos y su envío de las áreas que más los necesitan, como hospitales, infraestructura y escuelas.

“De las 227 empresas fantasma detectadas, un total de 52 han sido utilizadas por la Secretaría de Salud, siendo esta dependencia la principal fuente de adjudicaciones para las empresas investigadas. Según el diputado Ramírez Marín, cinco empresas controlan el 80 por ciento de los contratos en salud, concentrándose cerca de cinco mil millones de pesos”.

Cita el caso de la profesora Araly Rodríguez Vez:

“Uno de los casos más emblemáticos de corrupción en la administración de Cuitlahuac García Jimenez, es el de Araly Rodríguez Vez, una profesora de secundaria en Poza Rica que, sin contar con antecedentes en el sector de proveeduría, recibió contratos que suman más de 100 millones de pesos.

“La Secretaría de Salud le otorgó contratos por más de 60 millones de pesos mediante 31 adjudicaciones, los cuales incluían la compra de insumos para la emergencia sanitaria de COVID-19, equipo médico, y otros artículos. Estos contratos adicionales suman al menos 2.5 millones de pesos en adquisiciones de sillas de ruedas y carriolas pediátricas como parte del programa de apoyos funcionales.

“El Orfis también detectó que Rodríguez registró su actividad ante el Servicio de Administración Tributaria (SAT) siete días después de haber firmado un contrato con los Servicios de Salud de Veracruz, también está inscrita en el padrón de proveedores del DIF estatal y del Poder Judicial de Veracruz, además de los ayuntamientos de Emiliano Zapata y Perote”.

Araly Rodríguez es una pieza clave. 60 contratos los asignó la Secretaría de Salud proveyendo de batas e implementos para doctores, y otros 40 la Secretaría de Seguridad Pública, que incluyeron uniformes y despensas.

Hay un dato que no aparece en Excélsior. Cuando ocurre este saqueo el titular de la Secretaría de Salud era el doctor Roberto Ramos Alor, hoy diputado federal por Coatzacoalcos, el primer aliado que tuvo Rocío Nahle en sus inicios como militante del Partido de la Revolución Democrática.

Ciertamente, en el reportaje de Excélsior hay información cuestionable. Presenta un listado de empresas fantasma en el que aparecen Grupo Comercial Hermanos Peña Sánchez y Favaz Multiservicios, radicadas en Coatzacoalcos, que sí existen y desarrollan actividades comerciales desde hace más de una década.

Pero en ese listado figura otra empresa ligada a Morena: Xahni Construcciones Servicios y Arrendamientos, S.A. de C.V., a la que le fluyen los contratos, la mayoría por invitación restringida, en el ayuntamiento de Coatzacoalcos, bajo la administración de Amado Cruz Malpica, antiguo aliado y hoy enemigo de Rocío Nahle.

El saqueo alcanza los 5 mil millones de pesos. Se perpetró en casi media docena de secretarías del gobierno de Cuitláhuac García y el titular de Finanzas y Planeación, José Luis Lima Franco ni se inmutó. Es él la piedra angular en la trama.

Y Rocío Nahle lo premia. Repetirá como titular de Sefiplan.

Aún no inicia y el tufo a corrupción ya envuelve al proyecto Nahle.

 

METADATO

 

Hecho una piltrafa, Cuitláhuac García se suma al Desfile de las Catrinas, en Xalapa. Y se ve grotesco, como el bufón que es. Usa máscara, paliacate al cuello que termina utilizando como mantilla, un sombrero, el retrato de su mediocridad. Y camina. Y baila. Y así, disfrazado de idiota, va dejando el gobierno de Veracruz que nunca supo ejercer. Qué le importa si hay comunidades inundadas, olvidadas, que debió haber atendido, y no lo hizo; solidario con los perdieron todo, y no lo hizo; escuchando a la gente, mojándose los zapatos, con el agua a la cintura, que tampoco lo hizo. Qué más da si en las Cumbres de Maltrata hay vehículos bajo tierra y si los estragos del desgajamiento del cerro, por efecto de la deforestación o porque la naturaleza es devastadora, habrán de seguir así por casi un mes. Cuitláhuac es insensible a todo; insensible con el dolor de las víctimas de la violencia y con el que enfrenta la desgracia. Lo suyo es bailar, el jolgorio, el jelengue, la fiesta, la salsa, el merengue y el reguetón. Y así por seis años, Veracruz estancado, las arcas saqueadas, destruido por la violencia. Y él, el Cuit, encuentra en las catrinas el ambiente ideal. El muerto político con los muertos que desfilan quiere estar… La presidentA arbitrariA también hace de las suyas. Sheinbaum propone cinco alfiles para el comité de evaluación del circo elector de jueces. Y entre ellos, una joya: Isabel Inés Romero Cruz, ex presidenta del Poder Judicial de Veracruz. No ha de saber la presidentA arbitrariA los males que aquejan a Isabel Romero. Más allá de si fue un desastre al frente del Tribunal Superior de Justicia de Veracruz, arbitraria y rapaz, recuérdense sus problemas de memoria, su incapacidad para recordar rostros, tema que ventilaron públicamente la propia magistrada y el mismo gobernador Cuitláhuac García Jiménez. Sólo la presidentA Claudia Sheinbaum ha de saber por qué la propuso. O quizá ni sepa quién es. O le dijeron que Isabel Romero Cruz es una soldadera de la 4T y con eso bastó. Porque, la verdad, no se le conocen mayores méritos. En Veracruz, su gestión al frente del Poder Judicial fue desastrosa. Controlada por el ex secretario de Gobierno, Eric Patrocinio Cisneros Burgos, cuando éste era de la cuadra de Rocío Nahle García, Isabel Romero se prestó al juego siniestro con que fue echada del tribunal su antecesora, Sofía Martínez Huerta, hoy fallecida, a quien le endilgaron actos de corrupción y abuso de autoridad; luego ordenó una purga cesando jueces acusándolos de corrupción, y al final con todo y el presupuesto del Poder Judicial de Veracruz aprobado por el Congreso, accedió mansamente a un recorte dictado por el sátrapa llamado Cuitláhuac García que llevó a disminuirse salarios los magistrados –no todos, claro– porque la instrucción fue que el gobernador rasurara mínimo 900 millones de pesos, que nunca se supo dónde fueron a parar pero todo México supone en qué caja fuerte de un pseudomesías se resguardaron. Si la presidentA arbitrariA, Claudia Sheinbaum, no tiene idea de los negativos de Isabel Romero Cruz, que se entere. Y si ya lo sabe, qué fregada está su maléfica majestad… Pinta mal el escenario municipal para el PRI. Hasta “Güicho” Vasconcelos quiere ser edil. En Coatzacoalcos, dada la tendencia electoral, la pérdida de votos, si acaso tendrá un regidor. Y la refriega se dará entre cuatro francotiradores: Rafael De Hombre, Nereida Santos, Octavio Sen y Martha Fernández, en ese orden. Cuatro aspirantes, una regiduría. Y si se aplica el criterio de género a la hora del reparto por parte del Órgano Público Local Electoral, será regidora. No le da para más al PRI. Y hay corrientes priistas que ya se hartaron que sean los mismos rostros, a los que asocian con la derrota, y van a jugar sus cartas. Y si faltaba una mosca en la sopa, hace su aparición José Luis “Güicho” Vasconcelos, quien pregona que si el candidato a la alcaldía, por tercera vez, es su tío Carlos Manuel Vasconcelos Guevara, a él, por cuestión de linaje, le corresponderá ser el candidato a regidor primero. Así de azotado el “Güicho”. Falta ver qué dicen algunos conocidos suyos, de mano pesada, que lo tienen en la mira, muy en la mira. Pinta mal el futuro del PRI…

 

[email protected]

www.mussiocardenas.com

Foto: Especial