Joaquín Caballero y Theurel: trapitos al sol

* Deuda, aviadores, violaciones a la ley * Acusa Marcos delitos que él mismo cometió * Caín y Abel, versión Coatza * Show en Minatitlán: el Congreso sesiona * Diputados bufones * Cena para periodistas y no periodistas * PT denuncia a Héctor Yunes y Buganza * Mil 400 petroleros jubilados Son Caín y Abel. Lo que no se sabe es quién es Caín y quién Abel, quién es grato a su creador y a quién lo domina el odio y el rencor. Riñen Marco César Theurel Cotero y Joaquín Caballero Rosiñol por los dineros de Coatzacoalcos, por la deuda, …

Con Flavino Ríos asoma el alemanismo

Oaxaqueño, falsamente veracruzano, Flavino Ríos Alvarado gusta del truco y del documento falso, de un acta de nacimiento a modo, del veto y la inquina de Javier Duarte y del cinismo con que ha terminado por amar a sus verdugos. Sea todo para abrirle paso, una vez más, al alemanismo.
Vuelve Flavino a la Secretaría de Gobierno. Llega a operar la sucesión, sin rumbo la maquinaria de poder, rebasado el gobernador por las corrientes priístas que maniobran y avanzan, que acuden a sus referentes nacionales porque él carece de peso político, en un Veracruz hecho trizas por la deuda descomunal, la quiebra financiera, la violencia sin fin y el rezago social.

Héctor Yunes: el falso demócrata

De rodillas ante Javier Duarte, echador ayer, servil hoy, Héctor Yunes Landa ya olvidó que el gobernador de Veracruz es insensato, caprichoso, que impuso un gobierno de dos años para “enmascarar la reelección de una facción” política, sectario, autoritario y factor de desunión entre los priístas.

Lo tildaba así en el clímax de sus frecuentes iras, del odio que lo domina, la vesania y el rencor, en los días de la sucesión adelantada, herido el senador porque Javier Duarte, el inexperto títere de Fidel Herrera, le había roto el sueño y frustrado la ambición de gobernar Veracruz por seis años.

El Congreso pone parejo a Javier Duarte

* Lo urge a que investigue y resuelva crímenes de periodistas * La imprudencia y la inacción * El pastor, de redacción en redacción * Los reporteros gráficos agredidos * Así no se llega al cielo * Marchan los petroleros * Las razones de Didier * Mínimo, que renuncie Buganza * Atropello laboral y favor sentimental Javier Duarte se va a tragar sus odios. Dejará el discurso de las manzanas podridas, la insidia de los periodistas hampones, la imputación de que son “la expresión de los delincuentes”, la sutil amenaza —“pórtense bien”— que precedió al crimen del reportero Juan Mendoza …

Buganza: ni bronco ni independiente

Le faltaba a Gerardo Buganza mostrar su lado cómico. Ya lo exhibió. Dice que es más bronco que El Bronco. Y advierte que es más independiente que cualquier independiente, así se le vea atado a su patrón, Javier Duarte, ligado a la mafia en el poder.
Estiradito como es, soberbio aunque incurra en pecado, el secretario de Gobierno ha perdido la mesura, devorado por el afán y la ambición, inagotable el sueño de gobernar Veracruz.

CBTIS 113: las plazas y los millones

Qué verbo el de Chuayffet. Ni plazas espurias, ni vendidas, ni heredadas, dice el secretario de Educación Pública, sino concursadas y sometidos los maestros a evaluación porque ese es el fin de la reforma educativa. Qué verbo y qué manera de mentir.
Habla en abstracto Emilio Chuayffet Chemor, cuando la venta de plazas en el magisterio sigue, es fuente de riqueza de líderes y políticos, sirve para someter y controlar, para integrar a un ejército de alfiles que cuidan la industria educativa, un negocio que le da a quienes ejercen el poder y el área sindical.

El Chapo: la fuga en la que nadie cree

Enrique Peña Nieto tiene un problema serio: nadie cree que El Chapo se fugó. O que se haya ido sin la complicidad de sus aliados en el gobierno. Amo y señor del Altiplano, el penal en que habitó año y medio, andaba a sus anchas. Pero cuando sintió el amago de la muerte, la hipótesis del asesinato, y el riesgo de la extradición, decidió huir. O salir por la puerta grande.
Se fue con la ayuda del narcosistema que lo encumbró, protegido por sus socios con poder, pues al paso de las horas y los días se fortalece la versión de que Joaquín Guzmán Loera tuvo ayuda de primer nivel para escapar.

El Chapo, libre o muerto

Enfurecidos, agentes de la DEA perciben “narcocorrupción” en la fuga de El Chapo Guzmán. Y así es. No se construye un túnel de 1.5 kilómetros sin logística e ingeniería, salvando obstáculos, drenajes, líneas de agua y mantos freáticos, hasta dar justamente con el área de regaderas donde se vería por última vez al líder del Cártel de Sinaloa.
Tramaron la huida sus cómplices, dentro y fuera del cártel, los de la mafia y los del gobierno, los de antes, panistas, foxistas y calderonistas, y los de ahora, peñanietistas, que en conjunto lo han librado dos veces de la cárcel y lo han encumbrado a lo que es: el narco más buscado, una vez más, del mundo.

UV: el “general” Arturo Bermúdez, bajo sospecha

Quizá otros no, pero el ataque a ocho universitarios fue una conspiración, urdido con saña, fraguado en la mente criminal de quien no escucha sino reprime, de quien no dialoga sino que asedia, de quien antes que hablar, amedrenta. Y luego se exculpa.
Duelen las heridas pero más el agravio. Recuerdan la irrupción violenta, el allanamiento a un hogar de Xalapa, la madrugada del 5 de junio, en la calle Herón Proal, cerca de la Unidad de Humanidades de la Universidad Veracruzana, cerca del PRI.

El gobernador y el Congreso: uno roba, el otro lo tapa

Javier Duarte no está solo. Tiene al Congreso estatal de su lado, servil, dócil, maiceado, para encubrir el endeudamiento y el despilfarro, para administrar la corrupción y el saqueo, para robarse el futuro de Veracruz y acabar con los sueños de los veracruzanos. En eso van juntos.
Se cubren con el mismo sarape, cómplice la mayoría priísta, los legisladores a modo del gobernador en todo acto de gobierno, sea la seguridad un caos y la violencia una ola que inunda todo el territorio, que golpea y disuelve familias, en el campo y la ciudad los cuerpos desmembrados, y a diario el secuestro, la extorsión, la trata y el levantón.