Evidencia que la designación del candidato de Morena en Coatzacoalcos, Pedro Miguel Rosaldo García, fue un dedazo. Ahora se dice ignorada… o burlada
Qué ilusa y qué desleal es Eusebia Cortés. Beneficiada en demasía por Rocío Nahle, ahora se engalla porque su delirio –la locura política es atrevida– llegó a su fin. No la hizo alcaldesa de Coatzacoalcos.
Henchida de soberbia, la “licenciada” Cheva sintió que la pila ya no le dio cuando, sin aviso previo, Morena destapó al ya multidestapado Pedro Miguel Rosaldo García –Pedrito o Pacho– para ser promotor de la 4T, o sea candidato a la presidencia municipal.
La Lic. Cheva, que es en serio ilusa, por no decirlo de manera más procaz, tenía por lo menos seis años cultivando el sapo de la alcaldía que le obsequió su mentora Nahle, cuando ni una ni otra imaginaban que la vida –y las trastadas de Andrés Manuel López Obrador– llevarían a una a ser gobernadora de Veracruz y a la otra a ser la engañada de Coatzacoalcos.
Cheva Cortés se amaneció con que Pedro Miguel Rosaldo ya mostraba su diploma de promotor, o sea candidato de Morena, y a ella nadie le avisó. O eso ha venido contando.
No terminaban de sonar los “cuetes” y estallar la pirotecnia en la parcela de Morena por el ungimiento del tecnócrata cuando ya la subsecretaria de Desarrollo Social del gobierno veracruzano transpiraba hedores de engaño y autoengaño. Y de ello habría de dejar su sello en las redes sociales.
“A mi equipo, amigos, compañeros y ciudadanos simpatizantes:
“Quiero, en primer lugar, agradecerles todo el apoyo que me han brindado durante esta Contienda Interna de mi partido, MORENA.
“Agradezco infinitamente todo su apoyo.
“A su vez, hago de su conocimiento que esta servidora jamás fue llamada por parte del Comité Ejecutivo Nacional ni Estatal de Morena para notificarme los resultados de la famosa encuesta.
“Hoy, vemos que ya sale un supuesto ganador de la misma, por el Municipio de Coatzacoalcos.
“Ante esto, queda claro que en Coatzacoalcos nunca se le dará la oportunidad a una mujer para que lo gobierne.
“Por todo lo demás, muchas gracias, como siempre, por soñar con un mejor Coatzacoalcos, ¡nos lo merecemos!
“Su amiga:
“Eusebia Cortés Pérez”.
No se sabe si lo que la indignó fue el engaño de Nahle o que simplemente fue ignorada.
Destacan tres puntos en su perorata: Morena no le informó que la “famosa encuesta” la ganó Pedro Miguel Rosaldo; que “sale un supuesto ganador” y que “nunca se le dará la oportunidad a una mujer” para que gobierne Coatzacoalcos.
Rocío Nahle García le allegó demasiadas margaritas a Eusebia Cortés sabiendo que nada la habría de saciar. Pero se las dio y la encumbró.
La hizo regidora en Coatzacoalcos, diputada local y ahora subsecretaria de Desarrollo Social, aún sabiendo que a la “licenciada” Cheva no hay banquete que la llene.
Nahle le pagó por adelantado.
Y Cheva se cobró con un exabrupto.
Quizá le duele que la contraprestación para tantos ingresos a la ubre presupuestal fue alta. Rocío Nahle la hizo cursar secundaria, prepa y carrera universitaria en tiempo récord. Como si fuera alumna del Instituto Patrulla.
Quizá olvide que al no ver señales ni el dedo elector a su favor, apareció posando la foto con el alcalde morenista de Coatzacoalcos, Amado Cruz Malpica, otro ex amigo de Rocío Nahle que quiso jugar la sucesión con cartas propias, intentando forzar una negociación.
Algo de mérito hay que reconocerle, sin duda, doña Eusebia. Es la única en Morena que, así sea una rabieta, desmenuza y despelleja la farsa de la encuesta que unge a Pedro Miguel Rosaldo como el enésimo salvador de Coatzacoalcos.
Ya se sabe en qué terminaron los dos experimentos previos, ambos fallidos, de la zacatecana que gobierna Veracruz: Víctor Manuel Carranza Rosaldo, tío de Pedrito Miguel, y Amado Cruz Malpica, que conjugaron la ineptitud con la corrupción.
A fin de cuentas, la gobernadora invitó el sapo y Cheva se lo comió.
Qué ilusa fue por dejarse engañar.
Y qué desleal por todo lo que Nahle le dio.
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