Renato Tronco Gómez

La vena cómica de Renato Tronco

Adolecía la política de un bufón y ya lo tiene. Es Renato Tronco. Fue alcalde, es diputado, es un hablador compulsivo, pesa sobre él la imputación formal de ser autor intelectual de un crimen y quiere ser gobernador de Veracruz.
Renato Tronco tiene ya un lugar en la picaresca política y además de su conducta netamente delictiva —golpeador de manifestantes, agitador que bloquea carreteras, protector de giros negros—, goza con el chantaje verbal y el ataque a sus enemigos pero también, y cuando puede, a sus amigos.